when you're drunk.


(1) ¡Yeah! ¡Estoy por llegar a los 35 seguidores, ladies and gentleman! Chance y no lo saben, pero el 35 es mi número favorito. No tengo razones específicas/chacoteras para ello, simplemente es. Ya celebre mi post número 35, y seguro celebraré las 350 entradas, y por supuesto, los 35 seguidores. So... esperemos a ver quien es el feliz afortunado en honrar a esta H. bitácora con su presencia y esplendor.

(2) Ejem. Veamos, pasé cuatro días entre resaca y borrachera, borrachera y resaca. Creo que en algón momento dormí, o me desmaye, o me ahogué en un mar de soporifero llanto romanticista. La cosa es que vuelvo a estar al tiro, y ya tuve un bastante de ligues infructuosos, vodka, mariachis, imitaciones victorianas de Juan Gabriel, vodka, heteros recalcitrantes y machines, vodka y bailotear toda la discografía de Lady Gaga. Hacia rato que no bailaba intoxicado, y me alivianó mucho. No es que sea precisamente el Hugh Hefner de Chilangolandia; de hecho, detesto enrollarme en fiestas y parrandas adjuntas, pero estos días fueron... introspectivos. Bah, a la mierda, fueron un desmadre guay.

Y curiosamente, muy productivo. El viernes al salir del último embrolle, tuve lo que Enrique Iglesias llamaría una experiencia religiosa, al subir al auto de Omar, con el audio a todo volumen, atravesando la ciudad en busca de sus putos cigarrillos... Voy a sonar arcaico, pero fue uno de los mejores momentos de mi vida. Estaba escribiendo un post padrísimo para describirlo y connotarlo, pero...

Mi inspiración esta en Saturno, y mi cabeza en Aranjuez. Ayer revisaba mis viejos cuentos
yaoi (remítanse a la frikipedia), y sin leerme chocante, tengo algunos párrafos realmente inspirados. Como de Pulitzer. Asi que he decidido enfocarme a uno solo, un hibrido entre cuento de hadas y los mundos sórdidos de Pahlaniuk. Tengo que pulir algunos errores de sintaxis, y concretar partes de una trama que nunca me terminó de cuajar. Tal vez porque lo escribí en esos buenos tiempos cuando escribía de sol a sol, cargado de energia y entusiasmo...

Y tu, dulce paranoico,
Vagando en tus bosques de artificio,
De angel encubierto, atavios,
escapas a la umbra de los simples,
urdiendo el calor de los mortales.
Tu, anhelo concretado,
arrancando al eléctrico monologo
el llanto que teme y desola.
El publico desfila sin andanzas,
aspira lo gélido de su mirada,
el incubo cede, retrocede,
quema y sana sin articular.


¿Ven? No como ahora, que una sola linea de ficción me succiona los sesos. Crisisdeidentidad no me quiere con un Nebula en las manos.

(3) Acabo de conseguir Choke, justamente de Chuck Palahniuk. Si, el mismo trastornado que escribió Fight Club, el único libro en el mundo que se hace popo junto a su magistral versión fílmica. Como sea, la primera página me enamoró, con ese toque agresivo/pseudo-anarco que entreteje una diatriba muy interesante sobre el humano en la sociedad, amén. Asi que me largo a leerlo.

p.d: si, la estrofa creepy es mia, fragmento de otro poema. Acepto críticas y mentadas.

(arriba) una foto de Christophe Gilbert.

2 comentarios:

Cloe dijo...

No te preocupes, esas cosas de la inspiración van a rachas. Yo por ejemplo ya no escribo tanto como cuándo tenía 17 años, pero las cosas que escribo ahora son mucho mejores, por lo tanto es mejor tener una sola cosa muy buena que quinientas regulares. Igual ese cacho que pusiste está buenísimo, ¡ponte a escribir!

Besos!

P.D. Que buen título el de tu post....me pregunto de donde lo sacaste...jaja ;P

Eduardo dijo...

Jajaja interesante!
Yo jamás he estado borracho así que no
puedo dar mi opinión al respecto!

En cuanto al fragmento, antes tendría que preguntar ¿Que estudias?.
Me parece que escribes genial. Tu estilo me gusta. Síguelo haciendo.

Saludos y hasta otro blog.
Lástima que no fui el follower 35! de haber avisado antes me esperaba! jeje

Publicar un comentario